domingo, 16 de septiembre de 2007

Como ir... ahora al cielo...

Como Star está de capa caída por el reciente finado anime, LS (un nanosegundo de silencio) me toca a mí darle vida a esto... veamos... toca ir al cielo...
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Con este sencillo manual aprenderéis a ir al cielo de la manera más cómoda y fácil (ojo, al heaven... no al sky). Es primordial, para ello, morirse, porque si no nos costará la misma vida el proceso y, como al final tendremos que pagar nuestras deudas acabaremos en lo mismo.

Una vez muertos, como especial summon de la importancia, tendremos que esperar a que llegue la tipa negra con capa y nos lleve al cielo (con el tiempo de rigor establecido por ley) y una vez allí, esperar a que aparezca el juicio (esta vez sin apretones).

Estando en el juicio, Dios nos hará una serie de preguntas a las que tendremos que objetar con el comando "/objection" presentando ciertas pruebas que debemos haber recogido antes de morir (o después, mientras esperamos a la muerte). Las pruebas, y el momento de uso, son las siguientes.

Una cruz gastada:

Se encuentra detrás del altar de la iglesia de tu barrio, hay que presentarla justo después de que Dios diga "¿Has sido un buen cristiano?". Cuando se la muestres te preguntará "¿Y por qué la tienes tan gastada?" a lo que habrás de responder: "Porque he crucificado a miles de personas en ella".

Lucifer, el fiscal, intentará alegar que asesinar gente es malo porque "lo dice la biblia" y llamará como testigo a Pablo de Tarso que traerá en la mano una biblia. Para descubrir sus mentiras tendremos que usar:

Un vídeo de un tipo crucificado atravesado por una lanza.

Lo podreís conseguir en cualquier videoclub, y modificadlo para que parezca que vosotros sois los asesinos (esto llevará más tiempo). Cuando Pablo de Tarso diga "Y Jesús sufrió mucho por ser asesinado" presionadle. Acto seguido preguntadle "cómo murió" y entonces dirá "atravesado por una lanza". ¡Objetad y enseñadle el vídeo! El testigo se derrumbará y aceptará que fue él quien mató al pájaro (paloma) del juez (dios), por lo que lo echarán del estrado.

Una biblia

Se encuentra en cualquier librería especializada. Justo al final del juicio, cuando parece que vais a ganar e ir al cielo, Lucifer protestará diciendo "Todavía queda una última cosa... aquello que haciáis con una sola mano.

Preguntadle "¿Tienes pruebas?" (no deis en "qué cosa" porque entonces perdéis y vais abajo). El fiscal asentirá y mostrará un video en el que se os ve, ni más ni menos... ¡¡Qué hurgandoos la nariz!! Esto despertará la furia de Dios y querrá consideraros culpable. Cuando pregunte: "¿Alguna última aclaración?" ¡¡Mostrad la biblia!! Y señalad alguna página en la que hable de aquello de "Dios es todo perdón". La escena que seguirá a eso será la siguiente, puslad en "respuesta del juez" para verla.


Respuesta del juez.


Nota: Para llevar los objetos contigo tras morir, es MUY importante que estén dentro de una bolsa del Mercadona, sino se perderán en el traslado.


sábado, 8 de septiembre de 2007

Por qué irás al cielo (o al infierno)

Hoy os contaré como ir al infierno, el proceso no es sencillo, pero tampoco es demasiado difícil.

Es muy importante lo siguiente: ESTAR COMIÉNDOSE UN HELADO (en defecto del helado, sirve un laxante de sabor, pero es más recomendable el helado) de chocolate en todo momento. ¿La razón de esto? Ya la verán....

Bueno, tras el descanso publicitario ¿Qué no ha existido? ¿Y se quejan?... Vaya panda... venga, a lo que íbamos... es importante estar comiéndose un helado en todo momento por la sencilla razón de que nunca sabremos cuando vamos a morir, en el caso de que tengamos un certificado de defunción, pues podemos elegir el momento deseado.

Una vez muertos, con el helado en la barriga, llegaremos al cielo... concretamente a las puertas... donde nos esperará San Pedro. Como el camino hasta allí es de unos 45 minutos, la mayoría de los humanos hartos de helados de chocolate tendrán ganas de defecar, en ese momento, pídanle a San Pedro que les diga donde se encuentra el W.C.

Una vez estemos allí, la pantalla pasará al juicio y nos encontraremos en el estrado, cagando delante de Dios (sí, la vida no es un juego, pero la muerte sí... es un bug que hay). En ese momento, saldrá el... bueno... lo marrón... y Dios al verlo gritará...

- ¡¡COMO OSAS RECORDARME EL CHOCOLATE!! ¡¡NO SABES QUE PADEZCO DE PROBLEMAS DE AZÚCAR!! ¡¡IRÁS AL INFIERNO!!

Como veis, es un proceso bastante sencillo. Otro día les diré como ir al cielo sin tener que pasar por la escena del juicio (y desbloqueando la escena erótica de Dios).

lunes, 3 de septiembre de 2007

¡Resurreción! Una historia de Scar y una viñeta cutre

Esta entrada se compone de dos cosas, historia más o menos pensada y viñeta, pensada pero MUY cutre. La razón es que la he hecho con un programa de Linux - sí, ahora soy persona - el programa en cuestión no soporta a España, ni sus acentos en las vocales "í" ni sus signos de interrogación "¿" (el inglés sí, el muy racista) y además no sé manejarlo bien. Espero que la próxima tenga un poco más de calidad (o bastante más... mejor lo segundo). La viñeta está abajo del todo.
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y ahora... en lugar de comentarios pueden dejar "frikadas" - cambio de nombre :vaca: -

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En sus viajes por europa había llegado a un extraño paraje. Lo primero que pensó, al llegar y ver el cartel, fue que era una tierra de invertidos, pero pronto, los colmillos de los transilvanos le hicieron cambiar de opinión... o... al menos... recordar que aquello era más peligroso que la pajarería de la tele.

Consideró seriamente la posiblidad de buscar alojamiento debajo de un puente lejos del pueblo, pero, dado que todos estaban ya ocupados se acabó decidiendo por alquilar una habitación (o cuartucho) en la posada que el pareció más segura. Esto fue, escencialmente, porque la posadera no tenía ni colmillos ni capa, sólo una escoba y abundantes posaderas. Tras acomodarse en su cubil sacó un viejo libro - no sin dificultad, el libro era gordo y la mochila estrecha - de brujeria (si es que así se podía llamar a aquello) que Lairen le había dejado para: "Que te proteja mientras esperas en Transilvania", hubiera preferido una pistola, pero dado que era lo único que tenía a mano, comenzó a ojearlo. Había varios hechizos a priori muy útiles: "Vampiro, vampirito, castigado al rinconcito" o "Demonio aburrido, vuelve por donde has venido". Bastante lógicos, pensó.

Llamaron a la puerta, le había dicho a la posadera que no le molestara y Lairen no llegaría hasta el día siguiente, un olor a pony inundó la habitación... la puerta se abrió, y entró... un hombre (o era una mujer, seguramente un gato) totalmente vestido de negro, con capa y capucha, de tez blanquecina... y una guadaña en la mano.

TE TOCÓ - dijo

Enseguida la reconoció... la muerte... algo había en el libro para burarla, ¿podría recordarlo? Lo miró, allí estaba, en esa misma página. Lo leyó en voz alta.

- ¡Muerte! ¡Travesti!

¿Esto debería funcionar?

- ¡De guadaña de papel!

Empezó a dudarlo

- ¡Te quedaste así tras una sodomización!

COMO OSAS BURLARTE DE MÍ

Vaya, así que funcionaba, se había burlado de la muerte, ahora parecía enfadada. Movió su guadaña, Scar se protegió con el libro.

OOH! EDICIÓN COLECIONISTA ¡TE LO CAMBIO! ¡PIDE ALGO!

- La guadaña

LA NECESITO... DESPUÉS ME LA DESCUENTAN DEL SUELDO SI LA PIERDO

- Pues no hay trato - Scar se dio la vuelta -

BUEH... VENGA... VALE

Scar le tendió el libro, la muerte le dio la guadaña y acto seguido salió por donde había entrado.

El resto de la noche transcurrió sin más percances, fue a la mañana siguiente cuando alguien llamó a la puerta.
Toc. Toc.
Se oía.
Toc. Toc.
Repetió.
"Será Lairen - se dijo asustado - sí, no puede ser nadie más, seguro que es ella"
La puerta comenzó a abrirse, chirrió, el olor a pony volvía. Terminó de abrirse...

- ¡¡Serás guarra!! ¡Podías haberle pegado una patada a la puerta como haces siempre!
- Lo siento - se disculpó Lairen - pero es que este sitio dan ganas de hacerlo así... ¡¿Qué es eso?!

Una cara violeta, de colmillos afilados, asomaba por la ventana.

- ¡Un vampiro!¡Rápido Scar, coge el libro!

- No lo tengo, lo cambié por esta guadaña - se la enseñó - ¿A qué mola?

- ¡Serás estupido!

- Pero recuerdo el hechizo contra los vampiros.

Comenzó a gritarlo mientras hacía bailar la guadaña.
- ¡Vampiro vampirito!

El movimiento de guadaña había tomado un cariz cómico, acrecentado por las ¿cruces? de Lairen.
- ¡Castigado al rinconcito!

- Ha funcionado - gritó Lairen eufórica. - Aunque no se ha ido al rincón...

Entretanto, un joven vampiro, ladrón-pero-buen-vecino de profesión, se dirigía hacía el políticamente correcto "Centro de salvaguardado de personas con déficit de cordura" donde le esperaba un señor de cara roja, cola en flecha y cuernos sin esposa.

- ¿Qué se le ofrece, vecino? - dijo el demonio.

- Dos locos, en la posada de la bruja, creo que son peligrosos.

- oh! - dijo la cosa roja levantando la mano - iré a echar un vistazo.

Montó en su ambulancia (un Ford Fiesta con una cruz) puso el disco de Santurce y se dirigió a la posada.

- Apunta los hechizos que recuerdes - decía Lairen.

- Los recordaré si hiciera falta - refunfuñaba Scar.

Se abrió la puerta, Scarlehoff se prometió que la atrancaría la próxima vez que fuera de visita a ningún lado.
- ¡¡¡Ah!!! ¡¡Satanás!! - gritó Lairen desde debajo de la mesa y detrás de la silla. - Grita el conjuro.

- Veamos... ¡¡¡¡Demonio aburrido, vuelve por donde has venido!!!!

- oh! Sin problema.

El loquero se dio la vuelta, salió de la habitación cerrando la puerta tras de sí y bajó las escaleras.
- ¡Wow! ¡Soy un auténtico mago! - Scar saltaba de alegría.

Mientras... no muy lejos de allí... un vampiro esperaba a que un demonio bajara de un Ford.
- ¿y? -preguntó el primero al segundo - ¿Por qué no los traes?

- No están chiflados... son turistas.